Vivir en un loft tiene sus pros y sus contras, pero si eres optimista y positivo sabes que de cualquier lugar puedes crear maravillas. Y eso hicimos junto a Arquitectos Madrid 2.0 reconstruir lo que parecía imposible.
En este espacio tan reducido hay lavadora, lavavajillas de 45 cm, frigorífico, horno, microondas y por supuesto, fregadero y vitrocerámica. Una barra para desayunar de otro tono para romper con la encimera oscura, con una pata de silestone.
Para no agobiar la zona los muebles altos no se pegaron al techo, y todo está integrado para darle uniformidad y diseño. El suelo de madera le da la calidez y une la habitación con el resto del hogar. Grande o pequeño todo queda de ensueño si uno sabe jugar con cada elemento.
El antes y después de la cocina
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